El 24 de noviembre de 1940, Nacional goleó a Racing por 5 a 3 y conquistó el quinceavo Campeonato Uruguayo de su historia. El Campeonato Uruguayo de 1940 fue disputado entre el 22 de junio y el 15 de diciembre, a dos ruedas y por puntos entre los 11 clubes profesionales de aquel entonces (Nacional, Rampla Juniors, Wanderers, Peñarol, River Plate, Defensor, Sud América, Racing, Central, Bella Vista y Liverpool, quien se había incorporado a la 1ª División en 1938, tras ganar el campeonato de la División Intermedia en 1937). El 13 de octubre de 1940, Nacional venció a River Plate por 3 a 1, por la segunda rueda del torneo e inicio una racha de 32 victorias consecutivas por Campeonato Uruguayo, la cual se extendió hasta la tercera fecha del Campeonato de 1942. Esta racha de 32 victorias seguidas por torneos de Liga, es un récord en el fútbol sudamericano.
En la primera rueda del torneo, Nacional realizó una correcta campaña, logrando 15 puntos de los 20 en disputa. En las primeras 5 fechas, Nacional lideraba la tabla con Defensor, tras obtener 4 triunfos y 1 empate. El 24 de agosto por la séptima fecha, Nacional goleó a Defensor por 5 a 2 con soberbias actuaciones de Rodolfo Pini y Roberto Porta y se afianzó como único líder del torneo. El 1º de setiembre se disputó el primer clásico del torneo. Nacional, llegaba al partido como líder del certamen con 12 puntos, seguido por Peñarol con 10. A los 12 minutos, Porta metió un pase entrelíneas para Atilio, el juninense dribleó al zaguero Prado y definió cruzado ante la salida del arquero Barrios, marcando el 1 a 0 para Nacional. A los 29 minutos, el puntero Luis Tomás Volpi, anotó el 2 a 0 de cabeza tras un corner sobre el arco de la Colombes y a los 5’ del segundo tiempo, Ciocca aprovechó un despeje fallido de Raúl Rodriguez y definió por encima del arquero, marcando el 3 a 0. Nacional, cometió el error de quitar el pie del acelerador y permitió que Peñarol descontara, finalizando el partido 3 a 2. Tras la victoria clásica, Nacional empató con Rampla Juniors y cayó con Wanderers, en los últimos dos partidos de la primera rueda. Luego de esta derrota con Wanderers del 29 de setiembre de 1940, Nacional no iba a perder más unidades por el Campeonato Uruguayo, durante casi 2 años. El 13 de octubre, Nacional visitó a River Plate en el Parque Saroldi, lo cual fue una novedad por aquel entonces, ya que, rara vez los grandes salían del Estadio Centenario. Esa tarde, Nacional venció por 3 a 1 con dos goles de Eduardo Volpi y uno de Atilio, ante más de 8.500 personas que desbordaron la capacidad del Saroldi. Ese triunfo marcó el inicio de una racha de 32 victorias consecutivas por el máximo certamen de nuestro fútbol. Esta seguidilla de triunfos de Nacional en la segunda rueda, le permitió llegar al encuentro con Racing del 24 de noviembre, con la posibilidad de consagrarse campeón, cuando aún restaban 4 fechas. Racing se puso en ventaja a los dos minutos, pero rápidamente reaccionó Nacional y con goles de cada uno de los 5 delanteros, los tricolores golearon por 5 a 3 y se consagraron campeones uruguayos de 1940. El broche de oro de la campaña, fue el partido clásico del 8 de diciembre por la penúltima fecha. Esa tarde, Nacional goleó 5 a 1 a Peñarol con 4 goles del juninense Atilio García, récord que ostenta hasta la actualidad, como el único jugador que marcó cuatro goles en un clásico. A los 25 minutos, Luis Ernesto Castro desbordó por derecha, envió el centro atrás y Atilio marcó con toque corto el 1 a 0. A los 5’ del complemento el puntero izquierdo Bibiano Zapirain, anotó el 2 a 0, luego de que su remate rebotara en el defensa Barrada y 6 minutos más tarde Atilio puso de cabeza el 3 a 0, tras otro centro de Castro. Peñarol descontó a través de un penal mal cobrado y sobre la recta final del partido, Atilio marcó dos goles más sobre el arco de la Amsterdam, A los 72’, tras un pase de Ciocca, el juninense ejecutó con un puntazo al arquero Peri y sobre la hora, Atilio le jopeó la pelota por sobre el arquero y la recogió casi sobre la línea del arco, asegurando el gol con un toque corto.
El Director Técnico fue el “Manco” Héctor Castro, quien había asumido el cargo a principios de 1940, tras la no continuidad del escocés William Reaside. Castro había sido el Ayudante Técnico de Reaside durante 1939 y absorbió los conocimientos del brillante entrenador escocés. El arquero del equipo fue Aníbal Paz, quien por segundo Campeonato Uruguayo consecutivo tuvo la valla menos vencida. El back derecho fue Héctor Romero, un jugador procedente del 2º equipo de Nacional, que hizo su debut oficial en aquella temporada, aunque también actuó en seis encuentros Alejandro Morales, un zaguero que había llegado en 1938 procedente de Defensor, por su parte, el back izquierdo fue Juan Ramón Cabrera, un jugador con una extensa trayectoria dentro del Club. En la línea media, el half derecho fue Luis Alberto Luz, el centro half durante la primera rueda, fue el fraybentino Rodolfo Pini, mientras que en los 10 partidos restantes ocupó ese puesto el “Pato” Eugenio Galvalissi y el half izquierdo en 15 de los 20 encuentros fue Schubert Gambetta, un jugador de 20 años procedente de las divisiones juveniles, quien se iba a transformar con los años en una leyenda del Club. En zona de ataque, el puntero derecho fue el juvenil artíguense de 19 años Luis Tomás Volpi, aunque en la recta final del torneo, ocupó ese puesto el también juvenil de 19 años Luis Ernesto Castro, formado en las divisiones formativas del Club. El entreala derecho fue Aníbal Ciocca, segundo goleador del equipo con 11 goles y el centro delantero fue Atilio García, quien con 19 tantos, fue el goleador del Campeonato Uruguayo por tercer año consecutivo. El entreala izquierdo fue habitualmente el “Tano” Roberto Porta, mientras que el puntero izquierdo fue el puesto que más variantes tuvo durante el torneo. En la primera rueda, alternaron Arturo De León y Enrique Castro, hasta que el 27 de octubre debutó Bibiano Zapirain, un jugador de 20 años nacido en Tomás Gomensoro, departamento de Artigas, que llegó a Nacional procedente del fútbol de Bagé, quien se adueñó del puesto hasta el final del certamen. En el partido de la consagración del 15 de noviembre ante Racing, actuó junta por primera vez una de las más grandes delanteras de todos los tiempos integrada por Luis Ernesto Castro, Aníbal Ciocca, Atilio García, Roberto Porta y Bibiano Zapirain.