El 21 de noviembre de 1915, Nacional venció a Central por 2 a 1 y conquistó por cuarta vez el Campeonato Uruguayo. La obtención de este título, tuvo una enorme importancia en el historial del Torneo Uruguayo, ya que Nacional cortó el tricampeonato del viejo River Plate, vigente bicampeón uruguayo y de esta forma, impidió que el club de la dársena conquistara la Primera Copa Uruguaya en propiedad. A su vez, Nacional, inició el ciclo que iba a culminar con el tricampeonato uruguayo en 1917 y la obtención de dicho trofeo en propiedad. En la temporada 1915, la hasta ese entonces “Liga Uruguaya de Football”, pasó a denominarse “Asociación Uruguaya de Football” y se afilió directamente a la F.I.F.A. Por otra parte, realizó una reforma de Estatutos y Reglamentos, a través de la cual la 1ª División pasó de tener ocho clubes, a estar integrada por diez. El Campeonato Uruguayo de 1915, se disputó por puntos y a dos ruedas todos contra todos, entre los 10 clubes de 1ª División (Nacional, Peñarol, Universal, Wanderers, River Plate, Central, Reformers, Independencia, Bristol, quien se reincorporó a la AUF, tras haberse desafiliado en 1914 y Defensor, fundado en 1913 como ’Defensor Football Club’ y que en ese año, participó por primera vez de la máxima categoría).
En la primera fecha del Campeonato, Nacional goleó a 5 a 0 a Bristol y en la segunda jornada venció a Peñarol por 2 a 1. El partido clásico se jugó el 1º de mayo en el Gran Parque Central ante más de 15.000 personas. A los 37 minutos, Peñarol se puso en ventaja con un gol de Gradín, pero 4 minutos más tarde, Carlos Scarone empató de penal y a los 42’ del segundo tiempo, José Brachi marcó el 2 a 1 definitivo. En la tercera fecha, Nacional goleó a Universal 4 a 1, pero luego de ese buen comienzo, el equipo bajó su rendimiento. Finalizados los 9 partidos de la primera rueda, Nacional culminó con 13 puntos, 3 unidades por debajo de Peñarol que lideraba con comodidad la tabla. Por su parte, el vigente bicampeón River Plate, no repitió sus campañas anteriores y prácticamente a mitad del torneo, perdió las expectativas de lograr el tricampeonato y la primera Copa Uruguaya en propiedad. En la segunda rueda, Nacional mejoró sus performances y ganó 8 de los 9 encuentros disputados. En las primeras dos fechas venció a Bristol 3 a 1 y a River Plate por 1 a 0, mientras que Peñarol cayó con Universal y empató con Defensor. Con estos resultados, ambos equipos llegaron igualados al clásico de la tercera fecha. El encuentro se disputó el 8 de agosto en Belvedere, escenario en el que los aurinegros hacían de locales por no tener cancha. Nacional volvió a vencer por 2 a 1, con goles de Pascual Somma y Ángel Romano y pasó a liderar la tabla en solitario. Finalmente, el 21 de noviembre, Nacional logró el título en el último partido del campeonato ante Central. Nacional llegó al encuentro con 27 unidades, 2 por encima que su escolta Peñarol. A los 8 minutos de juego, Central abrió el score de penal, pero Nacional remontó el tanteador con dos golazos de Carlos “Rasqueta” Scarone y conquistó el Campeonato Uruguayo 1915. Finalizado el encuentro, la hinchada invadió la cancha para alzar en andas a los jugadores y acto seguido, se organizó una pequeña manifestación hasta Bulevar Artigas, en donde se realizaron algunas piezas oratorias y un espectáculo musical. Con esta conquista, Nacional obtuvo los tres títulos más importantes de la temporada; Campeonato Uruguayo, Copa de Honor Cusenier y Copa Competencia Chevallier, logrando la trilogía conocida como “Triple Corona”, gesta que solo había alcanzado el Alumni de Argentina en 1906. A su vez logró otro récord, tomando en consideración las conquistas de la Copa de Honor Uruguaya y la Copa Competencia Uruguaya, Nacional obtuvo 5 títulos oficiales en 49 días.
Previo al inicio de esa temporada, se sucitó una de las anécdotas más maravillosas de la historia de nuestro fútbol. Ángel Romano, que en 1914 defendió a Boca Juniors, tenía todo acordado para jugar en Peñarol en 1915. Cuando los Dirigentes de Nacional se enteraron de la noticia, esperaron al jugador en el puerto y apelando a la simpatía de Romano por Nacional, lo convencieron de jugar en el Club. Para evitar que Peñarol exigiera al jugador respetar el compromiso asumido, los dirigentes de Nacional no tuvieron mejor idea que desaparecerlo, simulando un secuestro. El “gordo” Miguel Aguirre y Sebastián Puppo, lo mantuvieron “secuestrado” varios días en un paraje de campaña de Pueblo Edén, hasta que finalmente, Romano “apareció” instantes antes del inicio del Campeonato para registrarse a último momento y defender a Nacional en esa temporada. El capitán de Nacional fue Alfredo Foglino, quien en esa temporada asumió por primera vez el capitanato del equipo. La oncena titular de Nacional durante el Campeonato de 1915, tuvo constantes variantes de jugadores y de puestos en los diferentes sectores de su alineación. Recién a partir del encuentro del 5 de setiembre ante Wanderers, se logró estabilizar una oncena titular para afrontar el tramo final del torneo. El equipo que culminó jugando las últimas fechas, formó con Santiago Demarchi en el arco, con Francisco Castellino como back derecho y Alfredo Foglino como back izquierdo; en la línea media, alinearon Pedro Olivieri en el half derecho, Abdón Porte como centro half y José Vanzino en el half izquierdo, mientras que el ataque del equipo, se integró con José Brachi como puntero derecho, Ángel Romano de entreala derecho, Pablo Dacal como centro delantero, Carlos Scarone de entreala izquierdo y con Pascual Somma como puntero izquierdo.
