El 21 de abril de 1918, Nacional se consagró campeón por cuarta vez de la Copa de Honor Internacional Cusenier. El certamen se disputó en el viejo Parque Pereyra de Montevideo ante unas 20.000 personas, entre Nacional, pentacampeón de la Copa de Honor Uruguaya y Racing, campeón de la Copa de Honor Municipalidad de Buenos Aires. El título correspondió a la temporada 1917, pero recién se disputó en abril de 1918, a causa de un distanciamiento en las relaciones entre AFA y AUF, sucitado tras la Copa América de Selecciones 1917 y porque la Copa de Honor Municipalidad de Buenos Aires, recién se dirimió en enero de 1918. Nuevamente, un torneo rioplatense ponía frente a frente a los dos mejores exponentes del fútbol uruguayo y argentino. Nacional, era el equipo más importante del continente, era el vigente bicampeón de la Copa de Honor Cusenier Internacional, pentacampeón de la Copa de Honor Uruguaya y a fines de 1917, se había consagrado tricampeón uruguayo, conquistando la Primera Copa Uruguaya en propiedad. Por su parte Racing, se había transformado en el dominador absoluto del fútbol argentino de aquellos años y en esa década, se iba a consagrar heptacampeón del Torneo Argentino de 1ª División entre 1913 y 1919, record inigualado hasta el día de hoy.
En el desarrollo del partido, Nacional se puso en ventaja tempraneramente a los 11 minutos de juego. Alfredo Zibechi recuperó un balón en campo rival, cedió al puntero derecho José Brachi y este habilitó a Ángel Romano quien definió bajo y cruzado batiendo al arquero racinguista Marcos Croce. A los 25 minutos, el quinteto ofensivo de Racing hilvanó una jugada combinada y Vivaldi decretó el tanto del empate para la visita. A partir de ese momento, Racing se acomodó mejor en el campo y manejó el trámite del encuentro hasta el final de la primera etapa. En el transcurso del segundo tiempo, Nacional retomó el dominio del partido y generó innumerables chances de gol. Sobre los 20 minutos del complemento, Somma efectuó un remate que rozó el travesaño e instantes después, nuevamente la pelota se estrelló en el travesaño tras un cabezazo de Romano. El arquero Croce, se convirtió en la figura del equipo racinguista, tras realizar varias atajadas decisivas. Sobre los 30 minutos, Rodolfo Marán estrelló un remate en el travesaño y en la jugada posterior, otro remate suyo dio en el vertical derecho. Minutos después, un disparo de Carlos Scarone volvió a dar en el palo del arco albiceleste y cuando parecía que la suerte no acompañaba a Nacional aquella tarde, llegó el ansiado tanto a los 40 minutos del segundo tiempo. Carlos Scarone habilitó a Romano, quien ingresó al área rival y definió bajo ante la salida de Croce, marcando el merecido segundo tanto. Dos minutos más tarde, Pascual Somma ejecutó un tiro de esquina y Ángel Romano marcó el 3 a 1 de cabeza alcanzando su “hattrick”. De esta forma, Nacional conquistó por cuarta vez la Copa de Honor Internacional Cusenier, convirtiéndose en el equipo que más veces conquistó este certamen.
La conquista de la Copa de Honor Cusenier 1917, tuvo una significancia especial para el Club, por haber sido el primer título obtenido luego de la muerte de Abdón Porte el 5 de marzo de ese año. El equipo tuvo otras bajas importantes como la de Santiago Demarchi, quien unos días antes había disputado el último partido de su carrera y se retiró de la práctica activa del fútbol y la de Héctor Scarone, quien no pudo ser de la partida debido a una lesión. El capitán del equipo fue el “Mariscal” Alfredo Foglino. Nacional formó esa tarde con Luis Ares en el arco, un arquero formado en las divisiones menores del Club que tuvo una activa participación durante 1917 y 1918, la pareja de backs la integraron Antonio Urdinarán por derecha y Alfredo Foglino por izquierda, mientras que la línea media se conformó con el half derecho Pedro Olivieri, el centro half Alfredo Zibechi y el half izquierdo José Vanzino. En la zona de ataque, la salida de Héctor Scarone trastocó la alineación habitual del quinteto ofensivo. José Brachi fue el puntero derecho, Ángel Romano, habitual centro forward, pasó a jugar de entreala derecho, Carlos Scarone, habitual entreala izquierdo, jugó como centro delantero, Rodolfo Marán, quien ingresó al equipo titular en lugar del “Mago”, fue el entreala izquierdo y Pascual Somma fue el puntero por esa banda. La figura más destacada del equipo fue el “Loco” Ángel Romano, quien anotó los tres goles y se erigió como el máximo goleador en la historia de la Copa de Honor Cusenier con siete tantos.